En esta estación la naturaleza va desacelerando su ritmo para preparar el camino silencioso del letargo invierno y en ese silencio se evidencia el corazón y su amor, con toda la plenitud del año. Esto quiere
decir que el otoño, no se refiere a la época de la decadencia
como tal, sino a la plenitud, la madurez; donde la vida se reúne y se
congrega en el seno del silencio para después renacer.
La caída de hojas puede simbolizar el desapego, la depuración, la necesidad de soltar viejas actitudes, comportamientos, para desintoxicar así nuestra vida y permitir que fluyan las emociones inteligentes y los sentimientos.
Namaste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario